Esta es una de las joyas de Pedro Velasquez...
La Profesora Básica Eliana Gómez fue elegida por Pedro Velasquez Seguel, el suspendido Alcalde de la Municipalidad de Coquimbo, para sucederme en el 2004, en el cargo de Director de la Escuela Diferencial "Juan Sandoval Carrasco" de Coquimbo, sin ser docente diferencial y sin conocer la realidad de la Educación Especial.
Luego de durar sólo algunos meses en esa Escuela Diferencial, por orden de Emilio Loo, Director DAEM de Coquimbo, fue trasladada como Directora, a la Escuela Básica Santo Tomás de Aquino de Tierras Blancas de Coquimbo.
La precisión de su elección como docente directiva queda de manifiesto en el siguiente artículo de Diario El Día de La Serena, publicado el 26/11/2006:
Impacto provoca denuncia de inspectora que acusó que directora la encerraba en un cuarto
La medida era la particular forma de “amonestar” de la autoridad del colegio cuando una idea no le parecía acorde a sus pensamientos.
Encierros en una pieza oscura, prohibición de reunirse en grupos, amenazas de despidos, son algunos de los castigos y órdenes que aplicaba la directora de la escuela básica Santo Tomás de Aquino de Tierras Blancas, Eliana Gómez Rojas, a sus profesores y paradocentes cuando algo no le parecía acorde a sus ideas. La denuncia la dio a conocer la ex inspectora del colegio, María Soledad Piñones Gallardo, quien en estos momentos se encuentra con una licencia por depresión, debido a las horribles humillaciones a las que se vio sometida. Piñones Gallardo relata que trabajaba desde septiembre del año 2000 en el establecimiento como inspectora. Esta situación cambió una vez que fue nombrada la nueva directora en marzo de 2005 designada por el suspendido alcalde de Coquimbo, Pedro Velásquez. “Yo tengo un problema de incapacidad en la pierna. Entonces ella me cambió de puesto y me dejó a cargo de la fotocopiadora, argumentando que era por mi bien”, dice. Agrega que pasaron los meses y en una reunión de gremio de los paradocentes dio a conocer su situación de que la habían cambiado de labores. “Esto lo supo la directora y, al otro día, citó a una reunión a todos los funcionarios de la escuela. Delante de todos me acusó de confabular contra ella, y que desde ese momento cumpliría mi jornada de trabajo encerrada en una pieza que está a un costado de la biblioteca, la que tiene de medida 2 metros por 2. Puso una mesa y una silla, y al cerrarla quedaba totalmente oscura, allí tuve que estar ese día completo que fue el 22 de agosto, y toda la mañana del 23”, indica. Continua relatando que sufrió una crisis nerviosa por lo acontecido, pidió que la dejaran ir al médico, o llamar por teléfono lo que fue negado por la superiora. “Todos se preguntarán por qué me sometí a eso, lo hice por el temor que me despidiera. Gracias a Dios que tenía una hora al kinesiólogo por mi problema, y tenía justificativo, así que pude salir aquel día del colegio, desde ese momento está con licencia”, sostiene. El caso lo presentó al Departamento de Educación Municipal de Coquimbo y en la Contraloría General de la República. En estos momentos gestiona con un abogado una denuncia en la Fiscalía por abuso de poder, acoso laboral y psicológico, lo que cuenta con el apoyo de Nolvia Piñones, presidenta del gremio de no docentes.
La medida era la particular forma de “amonestar” de la autoridad del colegio cuando una idea no le parecía acorde a sus pensamientos.
Encierros en una pieza oscura, prohibición de reunirse en grupos, amenazas de despidos, son algunos de los castigos y órdenes que aplicaba la directora de la escuela básica Santo Tomás de Aquino de Tierras Blancas, Eliana Gómez Rojas, a sus profesores y paradocentes cuando algo no le parecía acorde a sus ideas. La denuncia la dio a conocer la ex inspectora del colegio, María Soledad Piñones Gallardo, quien en estos momentos se encuentra con una licencia por depresión, debido a las horribles humillaciones a las que se vio sometida. Piñones Gallardo relata que trabajaba desde septiembre del año 2000 en el establecimiento como inspectora. Esta situación cambió una vez que fue nombrada la nueva directora en marzo de 2005 designada por el suspendido alcalde de Coquimbo, Pedro Velásquez. “Yo tengo un problema de incapacidad en la pierna. Entonces ella me cambió de puesto y me dejó a cargo de la fotocopiadora, argumentando que era por mi bien”, dice. Agrega que pasaron los meses y en una reunión de gremio de los paradocentes dio a conocer su situación de que la habían cambiado de labores. “Esto lo supo la directora y, al otro día, citó a una reunión a todos los funcionarios de la escuela. Delante de todos me acusó de confabular contra ella, y que desde ese momento cumpliría mi jornada de trabajo encerrada en una pieza que está a un costado de la biblioteca, la que tiene de medida 2 metros por 2. Puso una mesa y una silla, y al cerrarla quedaba totalmente oscura, allí tuve que estar ese día completo que fue el 22 de agosto, y toda la mañana del 23”, indica. Continua relatando que sufrió una crisis nerviosa por lo acontecido, pidió que la dejaran ir al médico, o llamar por teléfono lo que fue negado por la superiora. “Todos se preguntarán por qué me sometí a eso, lo hice por el temor que me despidiera. Gracias a Dios que tenía una hora al kinesiólogo por mi problema, y tenía justificativo, así que pude salir aquel día del colegio, desde ese momento está con licencia”, sostiene. El caso lo presentó al Departamento de Educación Municipal de Coquimbo y en la Contraloría General de la República. En estos momentos gestiona con un abogado una denuncia en la Fiscalía por abuso de poder, acoso laboral y psicológico, lo que cuenta con el apoyo de Nolvia Piñones, presidenta del gremio de no docentes.
PROHIBICIÓN DE REUNIRSE
La paradocente además revela que la directora prohibía a algunos profesores a reunirse en grupos, principalmente en los desayunos y almuerzos, porque aseguraba que confabulaban contra ella. También que obligaba a una operadora de servicio a ejercer como guardia nocturna del colegio. Y finalmente que tenía amenazados a 13 profesores que los despediría a final de año. Lo anterior es respaldado por un docente del establecimiento, que por miedo a represalias no quiso dar a conocer su nombre, agregando que la autoridad estaba llevando al colegio familiares para que trabajen, y que todo lo realizaba con un poder único, que ningún superior impedía.
PROTESTA DE ALUMNOS Y APODERADOS
El miércoles 22 de noviembre alumnos apoyados por los apoderados, realizaron un paro para denunciar estas irregularidades. Debido a esto se abrió un sumario para investigar lo relacionado con el anuncio de despedidos y contratos a familiares. Mañana el concejo municipal decide qué va a suceder con la dirección del establecimiento.
posted by Roberto Castro Boniche @ 3:51 p.m.
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