Sobre la idea de alma...
Etimológicamente el concepto de alma procede del latín “ánima”, “soplo”, “vida” y que tiene el mismo significado que para los griegos la palabra "psyche".
El alma, de acuerdo con muchas tradiciones religiosas y filosóficas, es una sustancia etérea particular que se encuentra en los seres vivos, donde se encuentra la esencia interna de cada uno de esos seres vivos. Todas las maneras de explicarlo admiten implícitamente que el ser humano vive una realidad donde la persona trasciende por su inteligencia, la realidad espacio/tiempo dónde está sumergido.
Sin embargo, hubo un tiempo en el que había el convencimiento de que las mujeres carecían de “Alma”. Desde la casi totalidad de las diferentes esferas sociales, políticas y/o religiosas del mundo se negaba la existencia del “Alma” en las mujeres. A lo largo de la historia son muchos los intentos de demostrar que carecían de ella y quienes más se opusieron a la creencia de que una mujer podría llegar a tener alma fueron los grupos religiosos. Poco a poco se les fue reconociendo ese “derecho” a poseer alma, pero todo iba en función de la raza, creencia religiosa o posición social de la mujer que debía tenerla.
Los cristianos disiparon parte de sus dudas a raíz del “Concilio de Éfeso”, en el año 431, donde llegaron a la conclusión, después de muchas discusiones y de “excomulgar” a algunos obispos, de que la mujer sí que tiene alma. En la actualidad algunos sectores judíos siguen discutiendo sobre si las mujeres tienen o no tienen alma, aunque los grupos más radicales y ultra ortodoxos siguen negando que la tengan.
Para los psicólogos, el alma es la interioridad del pensamiento emocional y mental, nada más. Para el científico Francis Crack, el ganador del Nóbel de 1962 junto a James Watson por descubrir la estructura de hélice del ÁDN en 1953, dedicó medio siglo de su vida buscando lo que por términos religiosos se entiende como alma y científicos como consciencia. El investigador postula que lo que se denomina “alma” es sólo una marea de neurotransmisores e intrincadas estructuras cerebrales cuyo peso oscila los 21 gramos y desaparece al morir, en el momento que el cerebro se detiene, totalmente independiente del género.
El alma, de acuerdo con muchas tradiciones religiosas y filosóficas, es una sustancia etérea particular que se encuentra en los seres vivos, donde se encuentra la esencia interna de cada uno de esos seres vivos. Todas las maneras de explicarlo admiten implícitamente que el ser humano vive una realidad donde la persona trasciende por su inteligencia, la realidad espacio/tiempo dónde está sumergido.
Sin embargo, hubo un tiempo en el que había el convencimiento de que las mujeres carecían de “Alma”. Desde la casi totalidad de las diferentes esferas sociales, políticas y/o religiosas del mundo se negaba la existencia del “Alma” en las mujeres. A lo largo de la historia son muchos los intentos de demostrar que carecían de ella y quienes más se opusieron a la creencia de que una mujer podría llegar a tener alma fueron los grupos religiosos. Poco a poco se les fue reconociendo ese “derecho” a poseer alma, pero todo iba en función de la raza, creencia religiosa o posición social de la mujer que debía tenerla.
Los cristianos disiparon parte de sus dudas a raíz del “Concilio de Éfeso”, en el año 431, donde llegaron a la conclusión, después de muchas discusiones y de “excomulgar” a algunos obispos, de que la mujer sí que tiene alma. En la actualidad algunos sectores judíos siguen discutiendo sobre si las mujeres tienen o no tienen alma, aunque los grupos más radicales y ultra ortodoxos siguen negando que la tengan.
Para los psicólogos, el alma es la interioridad del pensamiento emocional y mental, nada más. Para el científico Francis Crack, el ganador del Nóbel de 1962 junto a James Watson por descubrir la estructura de hélice del ÁDN en 1953, dedicó medio siglo de su vida buscando lo que por términos religiosos se entiende como alma y científicos como consciencia. El investigador postula que lo que se denomina “alma” es sólo una marea de neurotransmisores e intrincadas estructuras cerebrales cuyo peso oscila los 21 gramos y desaparece al morir, en el momento que el cerebro se detiene, totalmente independiente del género.
Fuentes: www.wikipedia.org ; www.elmundo.es
posted by Roberto Castro Boniche @ 12:16 a.m.
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